#Capítulo 5

Al otro día me despierto, como era lunes me tenía que ir a la escuela.
Yo me levanto, elijo la primera ropa que encuentro en el armario (como siempre), voy al baño y cuando salgo miro mis hermosos rollers, supongo que no los voy a usar más. Derrepente me saca de mis pensamientos el grito de mi mamá
Mamá: _____!! A desayunar!!!
_____: Ya voy!!!-le digo también gritando.

Agarro mi mochila violeta y bajo a desayunar.
_____: Hola-digo sin ánimo.
Mamá: Hola _____, toma-me dice también sin ánimo dejandomé sobre la mesa el café con leche y unas medialunas para deayunar.
Hermano: ¿Es cierto que te despidieron de Muggis Bar?

Yo no le contesté y me senté a comer. Cuando terminé agarré de nuevo mi mochila.
_____: ¿vamos?
Mamá: Si-dice tomando las llaves del auto.


Cuando llegamos a la escuela me despido de mi mamá y me bajo del auto.
Voy a mi salón y me siento al lado de el banco de mi mejor amiga, Demi.
Demi: Hola _____!
_____: Hola-le respondo con tristeza.
Demi: ¿que te pasa?
_____: Me despidieron de Muggis Bar.
Demi: ¿Encerio!!???
_____: Si, y encima mi mamá se enojó con migo por eso, ahhhggg ¿¡que más me va a pasar!?.
Demi: ¿pero porqué te despidieron?

Le conté toda la historia a Demi hasta que llegó la profesora de biología y paré  antes de que nos rete y tener un problema más.

Estube en todo el colegio de mal humor.Hasta que salí y me fuí caminando hacía una plaza para estar un poco sola y tranquila.

Estaba en uno de los bancos de la plaza sentada con mi mochila y de pronto se sienta al lado mío un chico, Justin.